“Creo que el futuro es de los niños”, así comenzaba la canción de la banda Chocolate Sexy en la película El Príncipe de Zamunda, todo un clásico de la filmografía de Eddie Murphy de finales de los 80 y que nos evoca a la niñez. Y sí, es obvio que el futuro es de los niños cuando de dulce hablamos, pero no siempre.
Y con este nombre tan apetitoso es con el que se ha quedado María Fernandez, la responsable de Chocolate Sexy, un negocio local dedicado a la repostería de calidad. La leonesa María ha estudiado en la Escuela de Hostelería de Leioa, en Bizkaia.

Sus postres, además de entrar por los ojos, nada tienen que envidiar a las ya convencionales tartas de las pastelerías. Ni Selva Negra, ni Shacher, ni Milhojas. A María no le tiembla el pulso a la hora de componer. Eso sí, rehuye del fondant. El uso de ingredientes es espectacular realizando mezclas de sabores que hacen que el paladar se refine degustando nuevos aromas, texturas y maridaje de gustos que, a priori, parece que nada tienen que ver con un postre.
Sus tartas de tres pisos son de lo más singular, en su colección puedes encontrar desde una tarta de chocolate y cerveza Guinness, a una bacon y caramelo o la famosa cake de zanahoria pero picante y con whisky. ¿Atrevidas, verdad?

Cuando el cine y las tartas se aman

Si estas mega tartas de tres pisos te llaman la atención puedes iniciarte en saborear este nuevo concepto de pastelería. Ya se pueden degustar en el Belmondo donde cada miércoles Yago y María fusionan el cine y la repostería. Un guiño, por qué no, en honor a una película elegida por los dos. Y no, no encontrarás fondant. Pero aunque parezca mentira que una tarta se pueda parecer a una película, su apariencia y su sabor tienen mucho que ver con el film en cuestión. A las imágenes nos remitimos, pero es mejor probarlas.

La tarta de Kill Bill es de limón y frambuesa con lemon curd.

Rocky Horror Picture Show es de chocolate y oreo rellena de crema de oreo y ganache de chocolate negro y cobertura de chocolate blanco.

Maria Antonieta es de calabacín y buttercream de toffe decorada con algodón de azúcar y flores de buttercream handmade, pistachos, nubecitas y perlas de caramelo.