Que el uso de la bicicleta se ha extendido entre el gran público en los últimos años no es una novedad. Podemos encontrarnos con todo tipo de bicis por la calle que se vienen a sumar a los bikers de toda la vida, pero en los últimos tiempos se están poniendo de moda las fat bikes, pensadas para moverse por la nieve o la arena en sus orígenes y destinadas a experiencias extremas, pero cada vez más habituales en la ciudad.
Lo peculiar de esta nueva versión de las bicis de montaña son sus ruedas, con un neumático mucho más ancho de lo normal, entre 3,5 y 5 pulgadas y cuyas ruedas se pueden inflar a baja presión, convirtiéndose en el punto de suspensión de todo el marco y transformando esta todoterreno en un vehículo muy cómodo para todo tipo de lugares, incluído el urbano y un auténtico 4×4 estable y con una amortiguación a prueba de bombas.