Seguro que alguna vez se te ha metido una canción de Julio Iglesias en la cabeza hasta llevarte al borde del suicidio. Esa canción que no puedes quitarte de la mente, que te persigue y se levanta contigo y encima te gusta, y lo sabes. Esas que todos conocemos como pegadizas, tanto que algunas se convierten en pegajosas. Esto que a todos nos ha pasado alguna vez, con la globalización y los anglicismos totalmente incorporados en nuestro lenguaje, ahora tenemos que hablar de música ‘cheesy’, un término que se aplica a otros muchos ámbitos de la vida, como a algunas personas ‘cheesy’.
La música ‘cheesy’ engloba a ese tipo de canciones que entran dentro de la categoría de cursi pero que también tiene un toque entrañable y que en algún momento de nuestras vidas nos ha encantado, adolescencia aparte.
Quién no ha cantado Linda de Miguel Bosé, o Bailar pegados esa balada que hizo triunfar a Sergio Dalma o, lo sentimos pero ya no podréis dejar de tararear Sueño contigo de Camela.